jueves, 16 de diciembre de 2010

Sensaciones y fotografía.

Es cierto, con la fotografía obtienes ese instante único que tu retina hubiese sido incapaz de almacenar, y es más, a veces formas parte de ese plan, de ese momento mágico.
Primero pasaste por allí varias veces y una idea se fue fraguando en tu cabeza, volvías a pasar y la idea cogía consistencia, de día o de noche, hacia arriba o de frente, encuadrando con las manos... necesitabas un cómplice porque solo sería complicado, habías decidido que sería de noche, con flashes y linternas. La cómplice fue Leo, todo estaba preparado aunque dudabas del resultado, seguramente sigues dudando... pero ese momento.
Es eso lo que queda, con tus limitaciones.


Te quiero decir....

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu voz se agradece siempre.